LA AVENTURA DE LEER


Potenciar el gusto por la lectura es una de las cosas comunes que todo docente persigue en su aula. No creo que sea necesario explicar los beneficios que el leer nos aporta, eso ya lleva demostrado desde tiempos inmemoriables, aún así, es una de las tareas que más nos cuesta fomentar y conseguir en nuestro alumnado. 

No hay curso escolar que no tratemos por todos los medios en incentivar la lectura en clase y fuera de ella. Incluso, en mi caso, las familias siempre apoyan y ponen en marcha cualquier iniciativa que se les proponga, pero no es fácil. El gusto por la lectura es una acto personal y de actitud propia. No se trata de repetir hasta la saciedad que hay que leer, si no de propiciar ambientes y estrategias que pueden ayudar a que la lectura se convierta en una actividad divertida y cree adicción entre nuestro alumnado. 

Tener una biblioteca de aula es un potenciador valioso, sin embargo, si propiciamos alguna misión o reto motivador a su alrededor los resultados pueden llegar a ser mejores. A continuación paso a describir algunos de los que hemos ido haciendo últimamente. 

𝓜𝓪𝓹𝓪𝓼 𝓭𝓮 𝓬𝓾𝓮𝓷𝓽𝓸𝓼

Una propuesta para fomentar la lectura es el uso de un carné viajero para ir sellando a medida que se va leyendo. En este caso, el carné viajero estaba representado con mapas relacionados con algunos libros famosos. En esta entrada de hace algunos años lo explico más detalladamente. Podéis acceder picando en la imagen.



𝓜𝓪𝓻𝓬𝓪𝓹á𝓰𝓲𝓷𝓪𝓼 𝓹𝓮𝓻𝓼𝓸𝓷𝓪𝓵𝓲𝔃𝓪𝓭𝓸𝓼

Si hay algo que motiva a leer de alguna forma es el uso de un marcapáginas elaborado por nosotros mismos y si ese marcapáginas está precedido por un juego, la expectación es máxima. 
Cuando un día empecé a hacer fotos a los pies descalzos de mi alumnado, la sorpresa fue mayúscula. Lo único que me preguntaban es que para qué hacía aquello.

Lo descubrieron unos meses después, ya que recorté los pies y los puse en la pizarra para que pudieran reconocerlos. Estuvieron un buen rato comparando calcetines, recordando cuáles llevaban ese día y por supuesto, viviendo un momento la mar de divertido.




Tras averiguar entre ellos dónde estaban sus calcetines. tocaba usarlos para hacer el objetivo final de la tarea. Con un depresor y pegando su cabeza en un extremo y los pies en el otro, logramos meternos en un libro de la forma más original posible y dando el pistoletazo de salida al uso de un marcapáginas único en todas las lecturas.





𝓔𝓵 𝓟𝓸𝔃𝓸 𝓭𝓮 𝓵𝓪 𝓢𝓪𝓫𝓲𝓭𝓾𝓻í𝓪

Introducir dentro de la gamificación de clase el fomento de la lectura, ha sido una de las mejores ideas ya que el juego impregna todo lo que se hace relacionado con ello. En esta ocasión fue "El Libro Mágico de la Gramática" el hilo conductor  para que se usara la lectura como forma de ir avanzando en el camino y consiguiendo puntos para subir de nivel. La lectura en este sentido se incentiva mucho más y la motivación hacia ella aumenta.

Lucas y Morty fueron los protagonistas de esta aventura y la Bruja Palabreja la malvada a la que había que derrotar. Para ello usamos esta plantilla que nos llevaba por el camino mágico cada vez que se leía un libro. Si se hacía su ficha resumen y se hablaba de él subiendo un vídeo a la plataforma Flipgrid se sumaban puntos en nuestro mapa de recorrido.




𝓐𝓵𝓲𝓬𝓲𝓪 𝔂 𝓵𝓪 𝓒𝓵𝓪𝓼𝓮 𝓜𝓪𝓻𝓪𝓿𝓲𝓵𝓵𝓸𝓼𝓪

Este curso escolar sigo usando el hilo gamificador para leer lo máximo posible en clase y en casa. En esta ocasión es "Alicia en el País de las Maravillas" la que nos guiará a través de Submundo para poder vencer a la Reina de Corazones. Para ello, la lectura es uno de nuestros retos.

Siempre me gusta hacer cosas diferentes en clase y para que el proceso lector sea más dinámico, he intentado dar un giro a nuestras evidencias lectoras. Para empezar, he creado el libro de "Mis lecturas Maravillosas" donde se han recogido dos cosas: una estantería de libros para colorear los que vayamos leyendo y un mapa de Submundo en el que cada tres libros se sella una parte del mismo. De esa manera, nadie pierde sus valiosos documentos y siempre están a mano en el aula para colorear a medida que van leyendo. 


Otra novedad es el uso del "Dado compresivo" para poder hablar a los demás de la lectura realizada. Este dado hace que trabajemos la expresión oral al mismo tiempo que damos a conocer los detalles de lo que hemos leído. Esto ha supuesto una pequeña revolución en clase ya que hay cola para salir a hablar sobre los libros leídos y al mismo tiempo vamos marcando un tiempo para obligarles a que lo inviertan más en expresarse concentrándose en todos los detalles que puedan recordar.



En cuanto a la ficha del libro que siempre la hemos hecho analógica, en esta ocasión, su usará digitalizada. A través de Book Creator y compartiendo el código del libro, cada uno tendrá la oportunidad de elaborarla a través del dispositivo de clase. Dar una vuelta a la forma de hacer las cosas supone un incentivo motivacional extra, si al mismo tiempo obtenemos recompensas y vamos progresando en nuestra aventura, todo se intensifica, incluido el gusto por leer.



Un poco más abajo dejo el material para descargar por si hubiera algún interés en utilizarlo en vuestras aulas. Si la temática no acompaña, pues la inspiración puede ser que os ayude a elaborar vuestros propios recursos acordes a los intereses del alumnado. La cuestión es fomentar la lectura y buscar estrategias que puedan ayudarnos a ello.

     
                                                             
                                                             ¡FELICES LECTURAS!

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